L3-37 Day

 L3-37

Fuente: Fandom.com

L3-37 (Vuffi), personaje de la franquicia de Star Wars, droide piloto femenino personalizada y hecho a sí misma con restos de otros droides, asociada con Lando Calrissian durante el reinado del Imperio Galáctico. 

L3-37 aparece por primera vez en el film Solo: Una historia de Star Wars (2018). Phoebe Waller-Bridge (julio 14/1985) puso su voz e interpretó a L3-37.

L3-37 originalmente era una simple carcasa de un droide astromecánico, aunque por descuido de su antiguo dueño comenzó a construirse por ella misma tomando una forma más humanoide y aumentando su banco de memoria.

No hay datos de cuando conoció a Lando Calrissian, se sabe que comenzó como copiloto del mercenario, el cuál se beneficia de su  base de datos de navegación, tiempo después se supo de su relación sentimental.

Una de sus primeras misiones mercenarias fue en Hynestia Prime, un planeta de tundra fría ubicado en la región de las Colonias, donde conoció a la princesa Rinetta Gan verificando que la droide tenía una personalidad diferente a los demás droides.

En cada viaje o misión L3-37 fue recabando información para su base de datos además de afianzar la idea sobre el libre albedrío de los droides, hasta tal punto que incluso combatió con soldados de asalto junto a Calrissian y esclavos Petrusianos. 

Aprovechando el desconcierto de la lucha, otro destacamento de soldados imperiales se hizo con el Halcón Milenario, su destino el planeta Vandor,  fronterizo del sector Sloo en el Borde Medio.

Fue en Vandor, concretamente en Fort Ypso  donde Calrissian conoció a Han Solo y Tobias Beckett, mientras L3-37 discutía con el humano Ralakili, regente de los fosos de lucha de droides en la Logia. 

L3-37 y Lando aprovecharon las habilidades del nuevo grupo para liberar el Halcón Milenario y viajaron hacia las minas de Kessel en la misión de obtener coaxium para Dryden Vos.

Durante la misión L3-37 liberó a varios droides que estaban siendo utilizados como esclavos por el Sindicato Pyke, iniciando así una revolución, pero en la lucha fue alcanzada por un disparo de laser y dañada gravemente.

L3-37 murió en brazos de su amigo y amante Lando, poco después este le quitó el núcleo neural de la cabeza para integrar sus datos en el Halcón y ayudar al grupo a escapar de las garras del Imperio. L3 fue parte esencial de la nave más buscada de la galaxia. 

Años después de la sublevación de Kessel, el droide de batalla B1 RO-GR escribió en su libro "droidografía" que esperaba mostrar a los humanos que las vidas de los droides tenían valor, citando a L3 como una de las unidades autodidactas más legendarias de la galaxia.